Propiedades del damascoEl damasco o albaricoque es una fruta redonda de sabor dulce y color amarillo, parecida al durazno o melocotón, pero más pequeño y blando, que se caracteriza por su contenido de vitamina C, hierro (combate la anemia) potasio (lo que lo hace una fruta diurética) magnesio y betacaroteno (con enormes beneficios para la salud de la piel y la vista). Es excelente para el sistema inmunológico, para el respiratorio y el circulatorio, y como antioxidante y aliado de la longevidad; proporciona energía, alivia el stress, regula la presión arterial, y hasta se dice que previene el cáncer. Ayuda a fortalecer los huesos y nos mantiene activos pero serenos. Aporta mucho más vitamina A, potasio y magnesio que el durazno.

Se originó en el continente asiático y es el fruto de un árbol que pertenece a la familia de las rosáceas.

Contiene taninos y fibras por lo cual es recomendable para problemas digestivos. Los orejones de damasco son muy favorables para combatir el estreñimiento, por estar presentes en ellos la pectina y la celulosa. Es muy útil en dietas para adelgazar, ya que solo posee 40 calorías en 100 gramos.

Puede consumirse fresco, cuando está maduro, o como orejones (damascos secos), o en jaleas, dulces, jugos o mermeladas.

Se lo recomienda especialmente en casos de debilidad y anemia por su alto contenido en hierro, que al asociarse al cobre que tabién posee, hace que el hierro se absorba con facilidad. también es muy bueno para los que padecen insomnio, depresión, cálculos biliares y problemas cardiológicos y pulmonares (asma, apnea del sueño).