HinojoEs una verdura barata, y rica, de sabor y aroma que recuerdan al anís, y apta de consumir en ensaladas. Combinada con tomates, zanahorias, cebollas, lentejas o simplemente sola, condimentada con sal y aceite, resulta deliciosa. Las infusiones preparadas con raíces de hinojo son muy sanas y duréticas. Pero además de su rico y crocante sabor, es muy beneficiosa para el organismo, especialmente porque sus semillas poseen un aceite esencial con grandes dosis de anetrol lo que la hace muy valorada en la buena digestión. Problemas de gases, inapetencia, trastornos biliares, cólicos, úlceras o diarrea, hallan en esta planta un aliado natural para combatirlos.

Pero eso no es todo, es muy rico en hierro, y por lo tanto recomendable para la anemia. Es además un gran antioxidante, por contener alanina, metionina, triptófano e histidina. Es diurético, con lo cual nos desintoxica y elimina las impurezas orgánicas, siendo por ello muy bueno en casos de cistitis, gota, artritis o edemas; y como si fuera poco, también es afrodisíaco. Posee un alto contenido en fibras e hidratos de carbono y pocas calorías, lo que incluye al hinojo en las dietas para reducir el peso corporal.

Entre las vitaminas, contiene provitamina A y B3. De los minerales nos otorga potasio, calcio, magnesio y fósforo.

Porque posee flavonoides, el té de semillas de hinojo, en proporción de media cucharadita por taza que se hierve 15 minutos y se toma frío, aumenta la producción estrogénica por lo que muchas mujeres lo consumen para agrandar sus busto. Los flavonoides, también estimulan la producción de leche en la etapa del amamantamiento y alivian los dolores de la menstruación.