Propiedades de las guindasEn otro artículo hablamos de las propiedades de las cerezas, frutos del cerezo. Las guindas proceden de otro árbol, el guindo, que produce estas frutas igualmente rojas pero un poco más agrias que las cerezas, por lo cual paulatinamente fueron desplazadas por las dulces cerezas.

Un poco de historia

Fue Lucio Licinio Lúculo un militar romano del siglo I antes de la era cristiana, que luchó contra Mitríades VI, que era soberano del Ponto (actual territorio turco) el que llevó los guindos de Cerasunta hacia Roma, según una interpretación de los escritos de Plinio, aunque se suponen que las guindas ya eran conocidas en otros lugares del continente europeo.

Guindas o cerezas

Muchas veces nos sirven algún postre a base de guindas y en realidad es porque la denominación se ha vuelto costumbre, pues en la mayor parte de los casos las elaboraciones culinarias se hacen con cerezas pues las guindas escasean.

Las guindas y también sus parientes cercanas, las cerezas, tienen un enorme poder antioxidante, por supuesto si se consume una cantidad considerable de ellas (aproximadamente una decena por día por lo menos) por su altísimo contenido en antocianinas que les proporcionan su característico color rojo y que combaten con eficacia los radicales libres, peligrosos aliados de muchas enfermedades graves.

Beneficios saludables

Son ideales para luchar contra los triglicéridos, la acumulación de grasa en el abdomen, los trastornos cardiovasculares y prevenir procesos inflamatorios, siendo muy bajo su aporte en calorías, por lo cual se las recomienda entre los alimentos que contribuyen a una dieta adelgadazante. Esto se comprobó en un estudio efectuado con ratas de laboratorio.