Los jugos de frutas y verduras desempeñan un papel fundamental en nuestra buena salud y nutrición, a tal punto que surgió una disciplina llamada jugoterapia, que evalúa el alcance y beneficios de su incorporación a la dieta cotidiana.

Así, se ha comprobado, por ejemplo, que para el insomnio y los estaddos de stress, no hay nada mejor que tomar una hora antes de dormir, un vaso de jugo de lechuga.

Si desea que su rendimiento intelectual sea el adecuado, pruebe con el siguiente desayuno: Coloque en la licuadora un vaso de leche, un puñadito de almendras y de pasas de uva, una cucharada de miel y otra de germen de trigo.

Si su problema es la acidez estomacal, tome en ayunas, un vaso de jugo que resulte de la combinación en partes iguales, de papa y repollo.

jugo de zanahorias es excelente para problemas de obesidad, vista, acné, trastornos hepáticos y de conducta.

Con respecto a la obesidad, resulta sorprendente los resultados de los jugos de verduras, más que los de frutas, que puden combinarse, dotándolos de ricos sabores.

Por supuesto, los jugos de frutas también son muy beneficiosos, sobre todo los cítricos, proveedores de vitamina C, tan efectivos para evitar gripes y resfriados, pero deben consumirse enseguida, ya que los contrario pierden sus propiedades.