Dieta e insomnioEl insomnio es muy frecuente en el ajetreado mundo actual, y esto se debe a que exigimos demasiado a nuestro cuerpo y a nuestra mente, nos estresamos en exceso, y además, comemos mal, ya sea por que ingerimos demasiados alimentos o inadecuados a horas determinadas; o por realizar ciertas dietas para adelgazar que al bajar la ingesta de carbohidratos producen ese efecto nocivo, de sentirnos cansados e irritables, pero a la vez no poder conciliar el sueño, ya que aumentan el cortisol, una hormona que es producida por la glándula suprarrenal, que estimula al sistema nervioso central. Además bajan los niveles de triptófano, un aminoácido esencial, que contribuye a producir melatonina y serotonina, imprescindibles para un sueño saludable.

Esto no significa que se deba comer mucho, sino los alimentos necesarios y recomendados para una cena frugal, ya que una cena muy abundante no ayudará a nuestro buen descanso: Ni mucho, ni tan poco, y no cenar e irse enseguida a dormir, por lo cual conviene hacerlo temprano, alrededor de las 20.30 horas.

Para los ovolactovegetarianos los alimentos que nos ayudan a conciliar el sueño son: la leche tibia con miel (salvo que se padezca de intolerancia a la lactosa, lo que es bastante común), los cereales integrales, las pastas, el arroz, verduras como lechugas, hinojos y espinacas; frutas y frutos: bananas, cerezas, piñas, almendras, nueces; semillas de calabaza o girasol; la soya y sus derivados; e infusiones de hierbas como el té de tilo.

Deben evitarse, el queso, que estimula, por contener un aminoácido denominado tiramina. Los picantes y los fritos tampoco se recomiendan pues complican la digestión. Otro alimento a evitar antes de dormir es el chocolate, que tiene tirosina que a su vez se transforma en dopamina y nos brinda mucha energía. El alcohol, el café, el mate y el té negro en cantidades elevadas también son nocivos para conciliar el sueño (entre otras cosas).