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Alimentos que aumentan las defensas
Aumentar las defensas orgánicas nos creará una protección superior contra virus y bacterias. No significa que no nos enfermemos, pero será menos frecuente, y nuestro organismo estará más preparado para liberarnos más pronto y sin secuelas de estos invasores. Nos daremos cuenta de que estamos con las defensas bajas si habitualmente estamos cansados, si nos duele el cuerpo, si nuestro cabello se presenta quebradizo, si tenemos heridas que tardan en sanar
El secreto está en llevar una vida saludable, con alimentación, ejercicios y descanso adecuados, liberándonos en lo posible, además, del cada vez más cotidiano stress de la vida moderna.
La dieta cumple en este sentido una importante misión. Reducir el consumo de grasas, alcohol, café, azúcares refinados, leche (salvo la fermentada) y harinas, con sus derivados (tortas, gaseosas, frituras, chocolates, dulces, caramelos, panificados) será muy bien recibido por nuestro cuerpo, al que se requiere mantener en el peso adecuado, ni con sobre peso ni excesivamente delgados. Los vegetarianos al eliminar la carne de nuestra dieta, evitamos ingerir gran cantidad de toxinas.
A la inversa, se debe aumentar el consumo de frutos secos, aceites vegetales, té verde, ajo crudo, miel, yogur, cereales, verduras de hojas verdes y frutas, cuanto más variado mejor. Especialmente se recomiendan todos los productos naturales que contengan vitamina C: cítricos, kivis, fresas, ciruelas, tomates y ajíes, Los que proveen vitamina A como zanahorias, zapallo y huevos; las proteínas vegetales presentes en las leguminosas, cereales integrales, frutos secos, arroz, quinoa, soya, semillas de sésamo y girasol y maíz. Del complejo B: legumbres, papas, yema de huevo, nueces y levadura de cerveza.
Como complemento dietario, ya hemos hablado de las propiedades de la espirulina, para fortalecer el sistema inmunológico.
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