Ingredientes

De la masa:

Harina: 400 gramos
Huevos: 1
Sal: 1 pizca
Aceite de oliva: 3 cucharadas
Agua: alrededor de media taza

Del relleno:

3 atados de espinacas (puede usarse 1 paquete grande de espinacas deshidratadas, 800 gramos)
1 cebolla
2 dientes de ajo
3 huevos duros
1 huevo crudo
¾ taza de queso rallado
3 cucharadas de nueces molidas
Sal y pimienta: a gusto

Preparación

Sobre una mesada o tabla de madera disponer la harina en formato de corona, rodeando un hueco, donde se colocan, integrados, el huevo crudo ligeramente batido, el aceite y la sal. Ir mezclando estos ingredientes centrales con la harina de la periferia, para armar con la ayuda del agua, una masa suave que pueda trabajarse sin pegotearse.

Hacer un bollo con la masa, y luego dividirla en dos partes, que se dejarán reposar, cubiertas por un repasador durante media hora.

Transcurridos los treinta minutos estirar finamente cada uno de los bollos de masa. Aceitar o enmantecar un molde de tarta, y cubrirlo con una de las masas estiradas, incluyendo los bordes laterales. Luego se colocará el relleno que habremos de preparar de la siguiente manera:

Si optamos por usar espinacas frescas debemos tomarnos el trabajo de lavar bien cada una de las hojas, hervirlas un minuto, refrescarlas y luego picarlas (quedan muy bien trituradas si se las pasa por la procesadora). Si se usan espinacas deshidratadas se reduce el trabajo ya que basta con hervirlas pero se aumento el costo, ya que son bastante más caras que las espinacas frescas, salvo que no sea la temporada.

Se doran las cebollas y el ajo picaditos en dos cucharadas de aceite vegetal, y se mezclan con las espinacas, las nueces molidas y el queso rallado, condimentándose a gusto con la sal y la pimienta. Se bate un huevo y se lo integra a la preparación.

Se hierven los tres huevos seis minutos, se los retira del fuego, se los pela, y se los reserva.
Se coloca el relleno sobre la masa, haciendo tres huecos, donde se colocarán los huevos duros enteros.

Se estira la otra tapa de masa y con ella se cubre el relleno, cerrando con repulgue que una esta tapa con la puesta en la base. Se pinta con una yema de huevo, y se introduce en horno moderado hasta que quede doradita.