La leche de soja se obtiene a partir de soja y agua y es la alternativa ideal a la leche de vaca (que produce dolores de cabeza, de huesos y otras dolencias a muchas personas), ya que no contiene lactosa, colesterol ni azucar y al mismo tiempo constituye una gran fuente de proteínas, fósforo, hierro, vitamina B y ácido fólico. Además, según los especialistas en nutrición, consumir leche de soja está especialmente indicado para las mujeres, pues contiene fitoestrógenos que ayudan a reducir el riesgo de padecer cáncer de mama.

Como curiosidad, decir que la introducción de la soja en el mundo occidental se atribuye a los comerciantes y misioneros europeos que viajaron a Japón durante el siglo XVI.