Propiedades de los repollitos de BruselasLos repollitos de Bruselas o coles de Bruselas (por ser allí donde es muy extensa la zona de cultivo de este vegetal, mientras otros afirman que allí se originó su producción) son una crucífera, variedad dentro del grupo de las coles, típica de la época invernal, y de zonas frías, que tienen el aspecto de un pequeño repollo y un sabroso gusto (para mí es bastante similar al brócoli). Se consumen con lavado previo y con una cocción aproximada de siete minutos.

Pero, además de un plato que deleita el paladar de quienes estamos acostumbrados al sabor de las coles, estos pequeños repollos son un excelente regalo para la salud, aunque como todo, no conviene excederse, pues en mucha cantidad pueden provocar meteorismo.

Tienen un alto contenido en fibra por lo cual previenen y combaten el estreñimiento y el cáncer de colon. Como anticancerígeno (previenen además del cáncer de colon, el de vejiga y el de estómago, algunos científicos afirman que también son favorables para atacar el cáncer de ovario, de pulmón, de mama y de próstata). En este sentido, actúan además de las fibras, los glucosinolatos y los carotenos. Además son útiles como antiinflamatorios y como antioxidantes naturales.

Contienen cada 100 gramos, 3,38 gramos de proteínas; y entre sus minerales, se destaca especialmente el potasio, aunque también aporta sodio, magnesio, hierro, fósforo, calcio, zinc y cobre. Provee vitaminas A, B1, B2, B5 y B6, C y E.

Su consumo es recomendable además de la ya citada propiedad de defensa contra el cáncer, para fortalecer el corazón, el sistema nervioso, eliminar líquidos y ácido úrico, evitar o curar anemias. Es recomendable para el hipertiroidismo pero no para el hipotiroidismo, como ocurre con todas las coles.