La pizza es una comida que a todos les gusta, y puede resultar novedosa si combinamos varios gustos en la presentación. La pizza de ajos, si no sabemos que a todos los comensales les agrada este ingrediente (porque deja mal aroma en la boca o porque alguien pueda resultar alérgico) es recomendable añadirla como opción junto a otras más tradicionales (muzzarella o napolitana).

Los ajos le darán a su pizza un toque picantito, además de añadirles las propiedades del ajo (bactericidas, fungicidas, fuidificador sanguíneo, hipotensor y prevetivos de enfermedades respiratorias). Podemos agregarle el ajo (4 dientes machacados) ya sea a la masa de pizza, sumándolos como un ingrediente más y mezclándolos con ellos, o espolvoreándolos en la cubierta junto a otros ingredientes como tomates, perejil picado, palmitos o huevos duros, o si nos gusta mucho el ajo, colocarlo tanto en la masa como para cubrirla.

Si se opta por comprar una masa precocida, por falta de tiempo, y es los uficientemente alta, y deseamos incorporar el sabor del ajo a la masa, podemos cortarla a la mitad, y rellenarla, solo con ajo triturado, o con una mezcla de ajo, orégano, albahaca y perejil picado.