Analizaremos la vitamina B y sus propiedades, y los alimentos que la aportan de acuerdo a una dieta ovo-lacto-vegetariana. La vitamina B es un complejo que actúa en conjunto, que puede faltar en personas ancianas, fumadoras, alcohólicas, veganas, convalecientes de operaciones o con problema intestinales o tiroideos.

A través de esta vitamina, el organismo recibe energía, proteínas, enzimas y hormonas, redituando en una buena salud del sistema nervioso, mental, arterial y cardíaco (B3 y B12) fortaleciendo las defensas orgánicas (B6) creando células nuevas (B9) estimulando el crecimiento (B2), la formación de glóbulos rojos (B6 y B12) y el metabolismo (B1, B2, B3, B5, B6, B9 y B12).

La vitamina B es hidrosoluble, o sea que se absorbe y elimina en forma rápida, por lo cual, su ingesta debe ser diaria, debiendo evitarse tomar té o café en la sobre mesa pues impiden su correcta absorción.

De este complejo, algunas vitaminas las produce el propio organismo, como la colina, el ácido lipoico, el ácido paraaminobenzoico y el inositol. Otras, debemos recibirlas a través de los alimentos como la B1 o Tiamina, la B2 o Riboflavina, la B3 o Niacina, la B5 o Ácido Pantoténico, la vitamina B6 o Piridoxina, la Vitamina B7 o Biotina, la Vitamina B9 o Ácido Fólico y la Vitamina B 12 o Cobalamina.

La contienen: los huevos en su yema, la leche y sus derivados en especial yogures y quesos, la levadura de cerveza, la soja, las algas, los cereales integrales (arroz, maíz, trigo, mijo, cebada), verduras (las de hojas verdes, las patatas, , tomates, cebollas y ajo), frutas (como aguacate, manzana, naranja, sandías, frambuesas y uvas), setas, frutas secas como los higos, y frutos secos como las nueces, avellanas o pistachos; y semillas (de lino, girasol, sésamo o calabaza).

Sin embargo, los excesos en algunos tipos del complejo pueden ser dañinos para la salud, como en el caso de la B3 o la B6, lo que nunca ocurre con el consumo natural de alimentos, pero para tomar algún complejo vitamínico se recomienda consultar al médico.