La menta, también llamada hierbabuena, es una planta herbácea de la familia de las Labiadas. De naturaleza muy olorosa, se utiliza en gran medida como condimento para las comidas así como para el perfume de estancias cerradas. La menta es una planta perenne, por lo que podremos acceder durante todo el año a ella en su naturaleza fresca.

Suele ser habitual entre mucha gente disponer de una pequeña maceta de menta en el balcón para tenerla siempre a mano cuando es necesario. Si ha pensado en ello, debe saber que estamos hablando de una planta que requiere mucha luz solar.

Los usos más habituales en relación con la menta son el tratamiento de la flatulencia, los cólicos, las cefaleas y los trastornos menstruales. Es también común su uso para abrir el apetito y contra algunas irritaciones de la piel. Su aplicación es casi siempre en forma de infusión, aunque también se usa cutáneamente en forma de compresas húmedas.

Hoja de menta