Cómo me hago vegetarianoSer vegetariano es una decisión personal, que puede o no ser definitiva. No hay que creer que una vez que se haya propuesto adoptar el vegetariano esto es irreversible, en general lo es, cuando se lo adopta como filosofía de vida, ya que allí entran convicciones ideológicas que difícilmente puedan cambiar, ya que quien lo hace por amor a la vida animal y por respeto la naturaleza, no puede luego dejar de sentirse culpable si se alimenta de otro ser de su misma especie, pudiendo vivir del consumo de vegetales, y sin tener que devorar cadáveres.

Los que a veces dan marcha atrás con su decisión son los que se hacen vegetarianos por razones de salud, ya que como el fin es egoísta, pueden muy bien resignar su salud, si en su escala de valores el placer que sienten al comer carne es superior a cuidar su cuerpo.

En general los que deciden ser vegetarianos al menos en un principio, son ovo-lacto-vegetarianos. La mayoría queda en esa etapa, mientras otros evolucionan hacia un vegetarianismo más puro, y suprimen los productos de origen animal, que sin matarlos los exponen a sacrificios, como la leche, los huevos y la miel.

Investiga los aportes nutricionales de cada verdura o fruto, verás que te sorprenderás; y en las casas de productos naturistas te indicarán muchísimos productos que reemplazan muy bien las proteínas animales, como por ejemplo, el tofu.

Lo más difícil es mantenerse en la dieta vegetariana en las reuniones sociales, ya que muchos caen en la tentación, al menos en los comienzos de su decisión, y otros comen para evitar estar dando explicaciones, pues aún resulta curioso a mucha gente que no comamos carne. No hay que preocuparse si alguna vez la tentación gana, verán que cada vez será más fuerte la convicción, y naturalmente se sentirán orgullosos de ser vegetarianos, y se lo dirán al mundo en forma abierta, porque nadie puede tener vergüenza de ser bueno, de no matar y sobre todo, de elegir cómo vivir.